Kash Patel ha sido un firme aliado de Donald Trump, compartiendo su escepticismo hacia el FBI y la comunidad de inteligencia. Ahora que Trump lo ha nominado para dirigir el FBI, Patel recibe más atención tanto del público como del Congreso. Mientras se prepara para un proceso de confirmación que promete ser difícil y largo, Patel será examinado no solo por su lealtad a Trump, sino también por su convicción —expresada en entrevistas y en su libro— de que el FBI, con más de 100 años de historia, necesita una reforma radical.
A continuación, se presentan algunas de las propuestas de Patel para la principal agencia de seguridad del país, aunque aún queda por ver cuántas de ellas realmente implementaría.
Propuesta de cerrar la sede del FBI en Washington
Los primeros empleados del FBI se trasladaron hace 50 años al edificio actual en la avenida Pensilvania, que desde entonces ha sido el centro de operaciones para los líderes del FBI. Si Patel logra sus objetivos, el edificio J. Edgar Hoover podría ser cerrado y sus empleados redistribuidos por todo el país.
"Cerraría el edificio Hoover del FBI el primer día y lo reabriría al día siguiente como un museo del ‘estado profundo’", comentó Patel en una entrevista en septiembre. "Luego, enviaría a los 7.000 empleados de ese edificio a perseguir criminales por todo Estados Unidos".
Este plan podría enfrentar obstáculos legales y logísticos, y podría ser más una propuesta retórica que una meta práctica. En su libro "Government Gangsters: The Deep State, the Truth and the Battle for Our Democracy", Patel sugirió una reforma más moderada, como trasladar la sede fuera de Washington para evitar la "captura institucional" y reducir la influencia política de los líderes del FBI.
A largo plazo, la ubicación del edificio ya está en duda. El Gobierno Federal seleccionó en 2023 un sitio en Greenbelt, Maryland, para una nueva sede, aunque el actual director del FBI, Christopher Wray, ha expresado preocupaciones sobre el proceso de selección.
Críticas a los medios y la búsqueda de ‘conspiradores’ en el gobierno
En una entrevista con Steve Bannon, Patel repitió afirmaciones infundadas sobre un fraude electoral a favor de Joe Biden. "Vamos a ir tras las personas en los medios que mintieron sobre los ciudadanos estadounidenses, que ayudaron a Joe Biden a manipular elecciones presidenciales", afirmó Patel. También mencionó la necesidad de investigar a los "conspiradores" dentro del gobierno federal.
Patel ha manifestado su intención de facilitar la acción del gobierno contra aquellos funcionarios que filtran información sensible y periodistas que la reciben. Esta postura podría llevar a revisar la política del Departamento de Justicia, que limita la incautación de registros de periodistas en investigaciones de filtraciones.
Llamado a una reforma radical de la vigilancia
Patel ha sido crítico con la forma en que el FBI usa la Ley de Vigilancia de la Inteligencia Extranjera (FISA). En su entrevista de septiembre, expresó su deseo de realizar una "gran, gran reforma. Enorme". Esta postura lo alinea tanto con los libertarios de izquierda como con los seguidores de Trump, quienes han cuestionado los abusos documentados durante la investigación del FBI sobre los vínculos de Rusia con la campaña de Trump en 2016.
El debate sobre la FISA sigue vigente, especialmente sobre la Sección 702, que permite la recopilación de comunicaciones de personas no estadounidenses sin orden judicial. Patel ha criticado la reautorización de esta sección por parte del Congreso en 2023.
Reducción de la comunidad de inteligencia
Patel ha defendido la idea de recortar la comunidad de inteligencia del gobierno, incluidas la CIA y la NSA. En cuanto al FBI, ha propuesto separar sus oficinas de inteligencia de sus actividades de lucha contra el crimen, aunque no está claro cómo se implementaría este cambio, dado que las operaciones de inteligencia son una parte fundamental del FBI.
El debate sobre la división del FBI ya ocurrió después de los ataques del 11 de septiembre de 2001, cuando algunos congresistas sugirieron crear una agencia separada para inteligencia doméstica. Sin embargo, esa propuesta fue rechazada, y el FBI ha sido transformado para enfocarse tanto en la seguridad interna como en la recolección de inteligencia.
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